Me llega por correo-e este chascarrillo:
- Imagina como será un país en el que el yate del Rey se llama, Bribón
- El mayor banquero, Botín
- La ministra de sanidad, Mato
- Y la que autoriza las macrofiestas, Botella
Y razón no le falta.
Me llega por correo-e este chascarrillo:
Y razón no le falta.
Ahora ya, casi irremisiblemente, nuestro planeta está condenado a sucumbir bajo el peso de nuestra basura. No hay motivos para el optimismo, señores lectores.
Sin embargo, queda siempre la esperanza de poder empezar a contaminar de nuevo en otro lugar. La nueva América, iTierra, será de diseño y la podremos colonizar, esclavizar, destruir para seguir con el frenético ritmo de consumismo y estupidez. Ya se ha descubierto, ahora sólo queda fabricar unas iNavesespaciales de diseño que nos lleven allá y en dos o tres generaciones podremos estar allá llenándolo todo de nuestra mierda. Seguro que el tío Punset, ciego tecnócrata donde los haya, ya estará clonado para entonces y podrá darle el tostón a los habitantes de allá.
Esta tarde, buscando en la red, he ido a dar de modo casual con un lugar que cita a esta santa casa: webwiki.es
Hay tres cosas curiosas.
¡Qué gran honor descojono que nos comparen con semejantes entes!
Vean, vean…
Vean que España se moderniza a toda mecha, pero sin abandonar su pasado, por si acaso. La foto está tomada en Guijo de Ávila (Salamanca) y es la plaza mayor (ex-plaza del generalísimo). Tan sólo han puesto el EX, por si uno de estos días hubiese que quitarlo. Pragmatismo en estado puro, como indican las células solares de su tejado.
Y no se trata de un juego de palabras. El domingo pillé a este curilla en su iglesia, pero omitiré el nombre del lugar para que el castigo divino no caiga sobre él. Estaba allí, tan joven, tan majo, clavado de hinojos en el banco, tras terminar su misa y con la mirada plantada en el dios del siglo XXI, el dios de la tecnología. Bueno, que mal pensado soy, joder, igual es que Dios también tiene Whatsapp, en cuyo caso estaríamos ante un caso de flagrante delito porque a quien se le ocurre ocultar su dirección a los feligreses para que puedan charlar tranquilamente en cualquier lugar y situación además de ahorrar un pico en calefacción. Vean como cuando el Malvado Margarito les llama «máquinas del demonio» a estos engendros no anda muy descaminado.
Espero sepan disculpar la mala calidad de la foto, pero es que no había mucha luz y un flashazo habría dado al traste con el ambiente de recogimiento.
Como ven, no sólo los perroflauta están indignados.