Oído en la calle

La calle como muestra de la realidad. En un semáforo, parado al lado de una bruja vestida con un abrigo de lomos de visón y botas de montaña (lo juro, no hace ni quince minutos, en la plaza de Luis Braille, al lado de un tipo que comenta «a mí no me despidieron, me ignoraron». Luego explica que trabaja por su cuenta cuando le llamaban y luego pasaba las facturas. Lo que han dado en llamar «freelance». Omitiré dónde y de qué trabajaba para preservar el anonimato del ignorado. ¿Se puede uno apuntar al paro como ignorado?¿Se cobrará por ello?

Ya sé que echan de menos las fotos, pero mientras el Malvado Margarito no haga un rato de «hacking» y arregle el «bug» de «WordPress» que no permite poner fotos sólo podrán ver vídeos y leer. Ya se siente, así es el mundo hexadecimal.