Hay que estar en guardia y prever las necesidades de la masa que acude a los templos en estas fechas y que consumen cantidades ingentes de agua bendita y, suponemos, otras materias. En Irlanda (y en otros países) han instalado estos tremendos contenedores de agua bendita, con sus grifitos y hasta un cubo para los grandes consumidores. Si es que están en todo… La primera foto es en Irlanda, la segunda en Italia.
Imagen captada en Oporto hace siete años. O al menos eso me parece recordar. Maqueta de una procesión de semana santa como mandan los cánones: con sus cofrades, esculturas, músicos, etc. Como se puede apreciar no solo en estas tierras nuestras somos aficionados a la ostentación pública de creencias, aunque quizá la exageración y vistosidad más cercanas al espectáculo que a la fe sean dificilmente superables las de este país.
Hay gente maja por el mundo. Puede que menos que canallas, pero la hay. En este lugar de cuyo nombre no me puedo acordar, alguien hizo una pintadita con rotulador indicando el punto exacto donde se pilla red, esa droga legal tan extendida.
En Soriano nel Cimino (no busquen la parodia fácil, porfa), pueblecito del Lacio italiano, cerca de Bomarzo (famoso por el parque de los monstruos y la novela), encontré este cartel en un paseo por el bosque del monte Cimino, cercano al pueblo. Dice:
TÚ QUE TIRAS TUS RESIDUOS EN EL BOSQUE ADEMÁS DE SER UN IMBÉCIL ERES 5 VECES GILIPOLLAS PORQUE EL PUNTO LIMPIO ES GRATUITO CON LA RECOGIDA DIFERENCIADA VAMOS A BUSCÁRTELO A CASA LOS VOLUMINOSOS, BAJO PEDIDO, VAMOS A RETIRARLOS A CASA LA TASA DE RESIDUOS LA PAGAS DE TODOS MODOS HACES AUMENTAR LA TASA DE OTROS CIUDADANOS ¡AVERGÜÉNZATE! LA ADMINISTRACIÓN MUNICIPAL
No me digan que no es triste tener que poner estos carteles para que la gente no tire sus enseres viejos, electrodomésticos, escombros y demás basuras en los bosques. Por desgracia también en nuestros pagos ocurren con demasiada frecuencia estas cosas, pero no he visto aún un cartel tan agresivo salido -sin duda- de algún cabreado y hastiado. En todas partes se cuecen habas, ya ven que no todos los monstruos están en el parque, algunos están sueltos y campando a sus anchas.
Si es que el ser humano no tiene remedio, o amenazas y castigos o nada. En la foto se puede ver unas señales pintadas en el suelo irlandés en el que avisan a los dueños de perros que recojan las heces o sino serán multados: «Recoge o paga», así de lacónico. Ignoramos si también será efectivo u ocurrirá lo que por estas tierras.
Cuando digo españoles digo también españolos y españolas, claro, y en general hispanoparlantes. Este puente de Dublín, por alguna razón desconocida para el que escribe, es el blanco de algunas pintaditas hechas en sus hierros y, cómo no, de la costumbre de colocar candaditos en él. Parece que todo empezó en el Pont Neuf de Paris, investiguen el origen de la estúpida costumbre en algún rato libre. El caso es que los candados intentan simular el amor. Mal vamos si a nuestra pareja le regalamos la ligazón en lugar de la libertad, así luego nos va como nos va. Los ilusionados amantes suelen poner nombres en las piezas metálicas y también hacerse autorretratos (selfies les llaman ahora) en el acto de imitar la estupidez ajena con su propia aportación. Lamentables tiempos, de verdad.
En la foto se puede apreciar además (y quizá hasta leer) alguno de los mensajes escritos en el hierro que ha dejado el turisteo, sobre todo hispanoparlante.
Seriedad y pagos. A ver si no, cómo va a funcionar bien un cementerio si no se paga el alquiler del terruño final. Y si para eso hay que recurrir a familiares, amigos o conocidos, pues se hace. Si no, pues seguirá el curso legal de estas cosas.
En la corchera también hay un aviso en el que se informa de que «si quieres que cante, la pasta por delante» como se suele decir. No solo para ocupar los terrenitos con nuevos inquilinos, no, también para sacar a los que «okupan».
Los humanos hacemos negocio de todo, y no es de ahora, que las exhumaciones arqueológicas ya denotan que la costumbre es más vieja que las sopas de ajo (sin pimentón, claro).
Fotos tomadas en 2016 en el cementerio de Luarca (Asturias)
La tautología como figura literaria, como elemento de distracción o, como en este caso, como elemento de despiste. El caso es que parezca que se ha aportado información, lo que me recuerda la máxima «Ya que no somos profundos, seamos confusos».
Por si no ves la imagen ya te la escribo:
ESTE CEMENTERIO PERMANECERA CERRADO POR REALIZAR SERVICIOS ESPECIALES DURANTE EL TIEMPO QUE DURE EL MENCIONADO SERVICIO
¡Toma ya! A ver si mejoras lo de decir sin decir. Yo me siento incapaz.
La foto fue hecha en Asturias -creo- en un cementerio en lo alto de un acantilado con bellas vistas al mar, en Luarca. Sin embargo es un lugar ideal para el descanso eterno, siempre que no te pillen los citados «servicios especiales». Ya sabes, infórmate antes de morirte, no sea que la prepares.
Mañana les deleito con otro par de cartelitos cazados en ese mismo lugar.