La capacidad de condensación que tienen los humanos es, a veces, sorprendente. En la foto que ilustra este comentario se puede apreciar, a pesar de la baja calidad de la imagen, la preocupación del español medio en una sola píldora: fútbol, lotería, nacionalismo, localismo y anti-animalismo. Tomada en el mismo lugar que la de ayer, en Abertura (Cáceres), es este escaparate una muestra de la estupidez generalizada que vive la piel de toro. Venden lotería (soma para la crisis), con un toque futbolero (soma en general y machismo), junto a collares de perro (anti-animalismo) en los colores rojo y gualda (soma nacionalista) y verde-negro-blanco (soma localista extremeño). Vamos que no se puede decir más con menos palabras ni se puede conocer un país y sus gentes con más precisión que en esta concentración de iconos.
No hay remedio a la estupidez generalizada, parece. Me acuerdo ahora de Max Estrella, personaje de Valle Inclán que en «Luces de Bohemia» decía en la escena VI
¿Mateo, dónde está la bomba que destripe el terrón maldito de España?
¡Que poco han cambiado los tiempos en los últimos cien años!