Ayer por la tarde estuve un rato con una amiga y su familia. Ellos viven en Paiporta (Valencia), una de las localidades más afectadas por la DANA del pasado mes de octubre de 2024. En realidad, hoy, solo sobreviven.
Me contó muchas cosas y algunas me hicieron tener que contener alguna lágrima.
Duele mucho muchísimo comprobar, una vez más, como seguimos en manos de auténticos incapaces a los que nosotros mismos, los ciudadanos, aupamos al trono.
Vean, ahora a modo de ejemplo, como un inepto cadáver político de apellido Mazón la vuelve a preparar en una publicación del antiguo Twitter (las negritas son mías):
«Las Fallas son el alma de nuestros barrios, inundan cada rincón de la ciudad con música y ambiente»
Qué gran demostración de estupidez e insensibilidad. Eso sí, el mensaje original ya fue borrado.
El portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, dice (y no le falta razón):
«O es bobo o es mala gente. O probablemente es ambas cosas»
Me dicen mis amigos valencianos que si el PP no ha dimitido aún a semejante personaje es por simple aritmética electoral: la idea es mantener como sea a este ninot político hasta las siguientes elecciones para no tener que quemar anticipadamente a futuros candidatos del partido.
Y así se escribe la historia, queridos.

Fuente de la noticia original en El Diario.