Los grafiteros moralistas

Hay veces, pocas, en que la gente que escribe cosas en las paredes hace algo útil. Normalmente se trata de firmas de mayor o menor gusto repetidas hasta la saciedad para que al final nos quede en la cabeza la firma del tonto de turno. Para que parezcan más interesantes les llaman «tag» algo así como etiqueta. Y lo son, el marchamo de la estupidez del que las hace. Algunos más preocupados las hacen enormes en sitios bien visibles, no sea que pasen desapercibidos, su gran miedo. De colorines incluso y hasta las hay que tienen diseños artísticos. Pero todas tienen en común no decir nada, no aportar más información que el tamaño del ego del dibujante.

Hay otras, sin embargo, que se llevan haciendo desde que el mundo es mundo. O casi. Hay documentadas algunas en Pompeya y Herculano. Suelen tener algún comentario jocoso, lacerante o informativo. El caso que les traigo se puede observar hoy mismo en el túnel peatonal de la calle Labradores de Valladolid. Concretamente en el arranque de la subida de la escalera. Reza «SI HUBIERAS ESTUDIADO NO SERIAS PIKOLETO». Ala, para que luego vayan diciendo que los chavales de hoy día no hace cosas útiles. Al menos alguno.