No hace mucho los padres (tranquilos, no diré nombres) decían a sus hijitos e hijitas: invierte en vivienda, hijo, que la vivienda nunca baja. Una amiga dice, con razón, que la boca es de lo más castigado. Pues como ejemplo muestro una foto (podría tomar docenas en menos de una hora) de lo errado de afirmación de los que se llegó a llamar «nuncabajistas» que eran -curiosamente- los que invertían en vivienda.
Ha llegado a mis oídos el caso (tranquilos, no diré nombres) de una pobre gente que cambia de país bastante a menudo. Y les han pillado tres burbujas, dos en países europeos y uno sudamericano.
Y todo esto me pasa porque «Me acuerdo mucho pero mucho de la historia de España. Es más, yo creo que siempre tengo presente la historia de España». Frase sacada de la genial película «Amanece que no es poco» de José Luis Cuerda.