Pues en lugar de arreglar la tapa de ventilación que está mal le pongo un poco de cinta para que se vea y… ¡solucinao!
Así somos en este país. Y en otros, no nos creamos tan especiales…

Pues en lugar de arreglar la tapa de ventilación que está mal le pongo un poco de cinta para que se vea y… ¡solucinao!
Así somos en este país. Y en otros, no nos creamos tan especiales…

En Italia basta darse una vuelta por cualquier ciudad para ver una colección de chapuzas de lo más variadito. Los italianos son así en su tierra y también donde emigraron, no cito porque no vale la pena, es de dominio público. Las soluciones de este tipo se encuentran tanto en el norte como en el sur (quizá más en el sur) son tan patrimonio nacional como el buen café a buen precio (de esto bien podíamos aprender, ambas cosas) o como el lenguaje gestual.
El ejemplo que les traigo está tomado de Florencia, para que se vea que también en la parte mas europea pasan estas cosas.

Muestra de excelencia en el trabajo, esta vez en Portugal. No me acuerdo del lugar. Vean qué capacidad de arreglar de manera chapuza una avería sin apenas dejar rastro… Un lujazo que, desde luego, es de primero de «deserascanço» como llaman en los lusitanos a las ñapas de este tipo, pero las hechas más finamente.

Total, ¿quién se va a fijar? Esta foto está hecha en Dublín, así que se puede demostrar que el gen del trabajo fino -pero fino fino- está presente en todo el orbe.

Ejemplo de trabajo fino que fotografié no recuerdo donde, pero sí sé que fue en este santo país. Véase la excelencia de resolución, la exquisitez del acabado, la muestra de profesionalidad. Menos mal que no lo ha firmado, al menos. Quizá fuese consciente de la chapuza y no se atrevió a tal osadía.

Llevo varios días con este tema, de ahí la entrada sobre la universalidad de la chapuza, la chapuza portuguesa y ahora viene esta otra foto tomada en Asturias, creo, y que está en la frontera entre la chapuza, la ñapa y la solución temporal para siempre. Como ven hay lindezas de estas repartidas por los cuatro puntos del globo.

Quod Erat Demonstrandrum, locución latina que viene a ser «como se quería demostrar» y que nos vale hoy como demostración de que la chapuza es universal. Al menos bastante extendida. Vean esta foto tomada en Oporto (donde la francesinha es una religión). Chapuza, lo que es chapuza, es innegable que es. Para la colección.

Hay quien piensa que la chapuza es patrimonio de su país. Puede ser que en este país -por poner un caso cercano- esa sea la tónica de trabajo muchas veces. Habría que preguntarse si las prisas por terminar, los salarios poco atractivos y las presiones de este tipo tienen algo que ver con el asunto. Me temo que así sea.
Pero estamos aquí para demostrar que «la chapuza es universal». Vean como ejemplo esta bella imagen tomada en Irlanda. Como ven el acabado chapuzas indica claramente que el ñapas de turno podía figurar en un podium. Algún malpensado se habrá dicho «seguro que el que lo hizo era un españolito emigrado a esas tierras. Puede ser, pero también puede no ser.

Efectivamente, seguimos con las chapuzas y parece que nunca se acaban.
No me negaran que, esta que ahora les presento, recuerda mucho a esta otra publicada hace tan solo unos días:


En este estado lleva, la farola, bastante tiempo y, como la foto me parece que ya es bastante autoexplicativa, no les molesto más.
Esto es inherente al ser humano, no hay quien se libre. Este bello bucle de brida está fotografiado en Irlanda. En los últimos tiempos ha tocado este país, es que tenía muchas cositas guardadas de allá, no es que les tenga manía, qué va,
