Si es que hay gente que va declarando la imbecilidad por do quiera que va. Si es que se merecen unas collejas a ver si despiertan. En este caso que ilustro (hecho en la calle Alfonso de Castro en Salamanca) no me refiero a la pintada «No al heteropatriarcaco (sic) – Feminismo o barbarie». Podría por aquello de que hacer pintadas en un edificio de viviendas vengo considerándolo barbarie, pero no va por ahí el comentario, sino por el memo que ha llenado las paredes de la ciudad con pintadas en las que aparece su número de teléfono. Como lo oyen. Este pájaro, un tal Miguel según reza el anuncio puesto en el milanuncios.com en el que por cierto exhibe unas habilidades lingüíticas y ortográficas curiosas. Está pidiendo a gritos y pintadas que le vaya a buscar la municipal a su casa y un juez le haga borrar las docenas de pintadas que ha hecho por la ciudad. Por (emprendedor) bobo.

Existe, sin embargo, otra posibilidad. Que corrija la concordancia de todas, en la peli «La vida de Brian«. Podría pasar, créanlo.