En la entrada anterior había una referencia a aquello de invertir una vez en el negocio hasta su extinción. Hay muchos ejemplo que de seguro los lectores de este blog podrán enviar, y les conmino a ello. Hoy estamos en Ibiza, creo que en Portinatx. Allí hay un cartel de un negocio existente que fue abandonado desde su creación hace como 40 años, tiene dibujos muy simpáticos de comiditas para los guiris.
La siguiente foto es de un cartel (más o menos de la misma época) con las indicaciones de la isla, sus discotecas, sus pueblos y la indicación «Ibiza by taxi». Salvo las pegatinas parece llevar allí desde antes de la muerte del dictador. Este cartel tiene pinta de haber sido puesto por los taxistas.
La tercera foto es el detalle de un mini-golf que allí se encuentra, al ladito del cartel de los taxis. Dicho negocio (se llevaba mucho antiguamente) muestra señales de haber sido repintado en varias ocasiones, pero nada más. Bueno, casi nada en realidad, porque las antiguas lámparas de hierro carcomidas por el salitre han sido sustituidas, oh maravilla, por otra de equivalente función, más duraderas y de poco coste. Se trata de ensaladeras y palanganas de plástico obtenidas, quizá, en algún negocio chino. Otra muestra más de esa inversión que algunos emprendedores de este país hacen en sus negocios. No son todos, está claro, pero muchos muchos muchos hay. Y se los seguiré trayendo.


