Archivo de la etiqueta: pintadas

Vecino memo

En un lugar donde vivía hace un tiempo, había un vecino que había hecho unas pintadas con un rotulador en el ascensor, se supone en los tiempos de viaje. Demuestran que el tipo es un poco memo. Lo más curioso es que luego me fui a vivir a otro lugar donde había unas pintadas muy similares, y esto me lleva a pensar en dos posibilidades: que el vecino memo o algún amigo hicieron el mismo recorrido (quizá en sentido inverso) o que el encargado de la manutención del ascensor es el autor de los dichos escritos. Se los muestro por si alguien tiene alguna luz que arrojar sobre el asunto. Del contenido de las mismas mejor no hablar, por ser tendencioso indudablemente.

Atûn sobre atún

Un grafitero al que le he visto muchas obras en Salamanca y alrededores es un tal ATÛN, y suele tener pintadas con un tal MEAS y con un tal DONK. Quizá hasta se trata de la misma persona. El caso es que me he encontrado en Conil de la Frontera esta curisosa pintadita suya hecha sobre una escultura de un atún que hay en una fuente junto a la puerta de la villa. ¿Será el tal Atûn conilense de origen y de ahí su seudónimo grafitero? Hay grandes posibilidades ¿no?

Menos selección, más revolución

La foto de esta pintada ya tiene un tiempito, como cuatro años. Eso sí, como pueden apreciar los dilectos lectores las cosas no han cambiado mucho, y si han cambiado es a la baja para muchos. A los ricos nos va mejor que nunca.

Sigan, sigan con su fútbol. No olviden la fecha de la final de la Eurocopa 2016 (10 de julio) y, por favor, no vayan a votar el 26 de junio, no vayan a perder alguno de los tres partidos que hay ese día.

Como decía uno que yo me sé: «Pan y circo, pero que poco pan y que mal circo»

Otra pintada vallisoletana

En la calle Gregorio Fernández de Valladolid encontré esta pintada: ARRASA-CON-LO-QUE-VEAS-Y-GENEROS-O-NO-SEAS

Afortunadamente no toda la gente joven de este país piensa de esa manera, ni siquiera todas las gentes mohínas de Valladolid que se hacen (y nos hacen) la vida imposible.

Santa ignorancia

Este mundo nuestro es cruel y despiadado. Hasta para ser alternativo hay que estudiar, leer, informarse y cuidar la ortografía. Si no, se cae en errores que te convierten en ridículo y te hacen el hazmerreír de tu grupo de amigos cuando justo pretendías pasar por guay. Paradojas de la vida, como le ocurrió al muchacho este en Valladolid que, aprovechando una inocente pintada anterior -ME LLAMO ALBERTO Y ME GUSTA EL HEAVY (SOBRE TODO JUDAS PRIEST)- va y tacha lo de «ALBERTO», lo de «HEAVY» y pone RAC el muy animal, sin saber que esa música (ejem…) a la que él se refiere, pobre, se llama RAP.

Generalizando, para terminar, lo que se deduce es que los «heavies» son más cultos que los «raperos». Bueno, no hace falta mucho, la verdad.

La susodicha pintada, para quien tenga curiosidad, está bajo el puente cercano a El Corte Inglés del paseo Zorrilla.

Pintadas con jugo

Hay veces que las paredes hablan por sí mismas. Esta en concreto es bastante divertida, porque aúna lo gamberril del acto de pintarrajear con lo filosófico y aún con lo banal. No sé si me gusta más la pintada «EL SER ES» de clara referencia a Parménides, o aquella otra de «DIOS MOLA MAZO» con su crucecita, ambas hechas, dicho sea de paso, por la misma mano esquizofrénica o quizá indecisa. Y todo en esa etérea pintura blanca, sobre la contundente, oscura, firme pintada negra y de buen trazo de la UJCE.

Resta decir que no me acuerdo de dónde hice la foto, pero bueno.

 

Los grafiteros moralistas

Hay veces, pocas, en que la gente que escribe cosas en las paredes hace algo útil. Normalmente se trata de firmas de mayor o menor gusto repetidas hasta la saciedad para que al final nos quede en la cabeza la firma del tonto de turno. Para que parezcan más interesantes les llaman «tag» algo así como etiqueta. Y lo son, el marchamo de la estupidez del que las hace. Algunos más preocupados las hacen enormes en sitios bien visibles, no sea que pasen desapercibidos, su gran miedo. De colorines incluso y hasta las hay que tienen diseños artísticos. Pero todas tienen en común no decir nada, no aportar más información que el tamaño del ego del dibujante.

Hay otras, sin embargo, que se llevan haciendo desde que el mundo es mundo. O casi. Hay documentadas algunas en Pompeya y Herculano. Suelen tener algún comentario jocoso, lacerante o informativo. El caso que les traigo se puede observar hoy mismo en el túnel peatonal de la calle Labradores de Valladolid. Concretamente en el arranque de la subida de la escalera. Reza «SI HUBIERAS ESTUDIADO NO SERIAS PIKOLETO». Ala, para que luego vayan diciendo que los chavales de hoy día no hace cosas útiles. Al menos alguno.

Falsimedia

Falsimedia es el nombre que se le da a los medios tradicionales de información (periódicos, radio, tv…) que están controlados por grupos de presión y poderes monetarios en la sombra. Y puede que no haya mejor definición, más escueta, más aguda, y además divertida de este hecho que vivimos a diario que la pintada que encontré hace unos días en Salamanca, en la calle camino estrecho de la aldehuela: «Nos mean y la prensa dice que llueve».

Imposible ser más escueto y más preciso. Hay veces que da gusto caminar por las calles ¿no les parece?

 

Nuevas pintadas

El ritmo actual de vida nos marca. Es indudable. Vean ustedes que los activistas ahora no hacen pintadas (o grafitis) sino que ponen códigos Q para mayor rapidez, facilidad y cantidad de información. Claro, siempre que se disponga de las «gafas» para leerlo, ergo un móvil con cámara, una conexión a internet, tiempo y ganas.

Antes bastaba con una tiza, más barata, portátil, ecológica, reusable y ligera, además de accesible a todos los públicos. En fin, tiempos nuevos, tiempos salvajes.