Esta costumbre no es española, no. No hay más que leer los periódicos para darse cuenta. O moverse del asiento y el mando a distancia.
No muy lejos de nosotros, en Portugal y más concretamente en Guarda hice esta foto el fin de semana en la que se ve fumando a gente en un bar, como la cosa más normal del mundo. En el país vecino también está prohibido, no vayan a creer. Ahí queda eso para escarnio del Malvado Margarito. Y para recochineo, comentando la jugada con algunas otras personas, me informan de que en sus pueblos también. E incluso en su barrio vallisoletano. Vamos, que al final tenía razón mi padre cuando decía: «La ley estricta de enero no lo es tanto en febrero»
Buenas noches