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Hamburguesería poco deseable (de la serie «nombres poco afortunados»)

Bueno, hay que decir que el nombre es poco afortuando en castellano, por eso hice la foto, pero quizá suene bien en polaco, pues fue en ese país donde se ubica la susomostrada hamburguesería. No me acuerdo del pueblo o ciudad donde se hizo, pero aunque me acordase de la pronunciación del nombre es casi cierto que erraría en la grafía. Arriesguemos sin embargo: Cracovia (en castellano) y Krakow (en nativo). Y si alguien conoce la ubicación, pues que le eche una mano a este pobre Acechor.

Señalética avanzada (perogrulladas 2.0)

Como los fines de semana son muy largos (últimamente al menos para mí) les voy a dejar con otro chascarrillo.

Andábamos el Malvado Margarito y un servidor de caza fotográfica en tierras burgalesas, cuando llamó mi atención la señal que hoy les regalo. Se trata nada más y nada menos que de la indicación de dónde se encuentra el CAMPO, así con mayúsculas. Una señal imprescindible para todo urbanita, de modo que no puede haber confusión entre maceta, alcorque, seto, parterre o cualquier otro pedazo de verde que se puede confundir con el CAMPO. Así, a la vuelta se podrá decir con todas las de la ley, me fui a dar una vuelta por el CAMPO.

De Perogrullo capital, oiga.

Nombres imaginativos

Ya me han informado de que me traiciona la memoria (bueno, las parejas también) y que el cartel de la entrada anterior no estaba en Menorca sino en Madeira. Y allá se encuentra también la «calle del frigorífico» que hoy ilustra este blog. Está claro que en Funchal sería muy importante la aparición del invento y que lo fue hasta para darle nombre a una calle. En Salamanca también tienen la «calle de la radio» y el «tunel de la televisión». Sin embargo me gusta más la «calle de la afilarmónica Nifu-Nifá» que encontré en Santa Cruz de Tenerife. Arranca sonrisas que se cotizan caras en estos tiempos.

Es también de reconocer que el uso de calles con estos nombres es mejor que andar dedicándoselas a santos, vírgenes, curas y generales, cuando no a dudosos pro-hombres de la patria, cantantes, futbolistas, tonadilleras, toreros o «Mariquelos».

Mundo absurdo

Inauguro una nueva serie de comentarios, esta vez «mundo absurdo».  Y quizá debería llamarse de otro modo porque casi todo lo que aparece en este blog son absurdeces, unas cogidas por ahí y otras pensadas por el Malvado Margarito y un servidor.

Pero vamos al meollo. Vean este indicador de restaurante que fotografié, si la memoria no me falla, en Menorca Madeira. Les juro por San Google que en la dirección en la que apunta el cartel lo único que hay es el mar, idiota, pero el mar. Bueno, al menos en ese momento no había restaurantes flotantes. Y si los hubiese habido no se podría haber llegado a ellos de forma sencilla (sí, ya sé que hay gente que se sube y baja por las paredes). En fin, uno más de los ejemplos del mundo absurdo en que vivimos. De esa «España es diferente» de que alguno tanto se ufana.

Apunte posterior: quizá apuntaba a algún barquito que no vemos por encontrarse de crucero en la mar océana entreteniendo jubilados o solteros.

Soluciones de bajo coste

En versión siciliana, eso sí. Vean este invento encontrado en Sciacca (Italia) en que se compensa la falta de espacio con una ingeniosa puerta-escaparate. Sin duda merece la pena un pequeño análisis, puesto que no sólo se solventa un problema sino que también se crea una sensación como de escaparate de barrio rojo de Amsterdam con este maniquí en su fanalito, como de mujer etérea, ideal, inalcanzable. Se admiten comentarios e interpretaciones, claro.

Antes de la crisis

Hice esta foto en octubre o noviembre de 2005 en Sevilla. Esto es, mucho antes de la crisis que nos azota, en plena época de atar-los-perros-con-longaniza, cuando todos éramos ricos, se vendían pisos como rosquillas y los jamones ibéricos habían hecho olvidar a las mortadelas. Y es que, amigos, la realidad supera a la ficción en tantas ocasiones que la fructífera mente de los escritores y la cámara de los blogueros no puede por menos de resignarse ante la evidencia. Ahora imaginen cómo estarán esos mismos portales del flamante ministerio de asuntos sociales cuando  por obra y gracia de la crisis artificial, un 20% largo de la población está en paro y, que las multinacionales y corporaciones ayudadas por los socialistas de derechas de este país han hecho una reforma laboral de oxímoron que pretende, lloren conmigo, arreglar el problema del paro despidiendo gente. Lamentable e inenarrable.

 

Postales desde Berlín I: una de dioses

El pasado mes de octubre, me escapé de celebrar la tan hispanísima fiesta de «El 12 de Octubre» y me largué en buena compañía a Berlín.

Allí pude encontrar, entre otras cosas, este bonito ejemplo de convivencia en paz y armonía de los viejos y los nuevos dioses en nuestro occidente actual. Sirvan ambos, como estupendo ejemplo de perfectos y elaborados sistemas de control de mentes y rebaños. Eso si, cada uno con sus particulares sistemas de difusión (como bien puede verse en la imagen).