En Europa siempre van un paso por delante. Observen la cuidada decoración, el gusto exquisito, la armónica combinación y el espléndido resultado conseguido en la decoración de esta moto que fotografié en Annecy no hace ni dos meses. Fantástico sincretismo de lo hortera, chabacano y vulgar que compensan con creces los malos ratos que hemos hecho sufrir a nuestros lectores los últimos días. Nos sirve de penitencia en esta pascual época del año.
