
Por si la duda…

Bello ejemplo que cumple la máxima del refrán. No literalmente, claro, se trata de un alicatador, pero bien clarito queda.
Amplio la zona de interés para que nadie se deje los oijtos en la lectura. La foto, por cierto, la hice en Valencia de Don Juan (León).
No me refiero al rey ni al emérito, no. Allá estas gentes con sus «trabajos» que pagamos religiosamente el resto de mortales no tocados por la gracia de los cielos. A ver, Acechor, céntrate que te vas por la tangente y aquí estamos para otros menesteres.
Vean qué bello cartel capté hace unos años en Pontevedra. Luego se quejarán de que los abnegados usuarios de las carreteras gallegas no se aclaren, pero ¿cómo nos vamos a aclarar con semejante jerigonza? Falta excelencia en el trabajo. Si esto era hace años no quiero ni pensar que cómo será ahora.
Sí, han leído bien. Es la idea loca de una «startup» (Sperm Racing) perteneciente a un adolescente pajillero y millonario norteamericano.
Pasen y lean… que por mi parte no habrá más comentarios.
… no tiene remedio. Se muere el jefe de la iglesia católica, cuya sede está en Italia, el hombrito era argentino, y se supone que este país nuestro es laico, pero declara tres días de luto nacional. Ya no nos vale con dar las condolencias y -en su caso- asistir a la inhumación del finado con los gastos y tiempos que conlleva. No. Tenemos que declarar luto nacional como si se tratase de una gran desgracia por accidente o otra catástrofe. Por ejemplo, y por hacer un poco de uso de la hemeroteca: se declararon 10 días de luto nacional por la muerte de todas las casi 75000 personas que fallecieron por el Covid (ver esta noticia):
El Instituto Nacional de Estadística ha publicado un informe con las defunciones en España en 2020, un año marcado por la pandemia en el que fallecieron 493.776 personas, 75.073 más que en 2019, con los mayores incrementos en abril (81,9%) y marzo (59,3%), justo al
inicio de la crisis sanitaria, y también en noviembre (un 21%).
Matemáticamente: 1 día de luto por cada 75000 personas, o sea, que un jefe de iglesia (al menos de esta) vale como 225000 personas (75000×3). No está mal. Quizá el cálculo se haya hecho teniendo en cuenta el gasto que ocasiona al erario público. Quizá no.
La idiosincrasia nacional en plena ruta del Camino de Santiago:
Podrán ver que el estado general de esta tapia/cerramiento no es muy bueno que digamos. Sin embargo, el cómo se resuelve el hecho de que la barra metálica no llegue hasta el murete es de nota.
La propia barra tampoco está en su mejor momento, de hecho dicha barra, aunque no se aprecie en las imágenes, está completamente doblada (motivo por el que no llega hasta el muro).
Parafraseando a más de uno, esto también es un ejemplo de la chapuza como «Marca Ejpaña».
¿Dónde se habrá quedado aquello del gusto por la excelencia y el trabajo bien hecho?
Quizá debería inaugurar una serie llamada «Vecindades molestas» con los carteles que se colocan para avisar a los vecinos de sus actividades incordionas. La foto de más abajo fue tomada hace tiempo, varios años, pero no me acuerdo de dónde. El texto dice (respetando la ortografía original):
Señorita seras
muy limpia entu casa
pero aquí eres una
guarra
lleba el perro a la
peña de los ladrones
a cagar
¡Vaya ud. a saber qué lugar es ese de «la peña de los ladrones»!
Observará el avezado lector que el cartón es reutilizado, así que también se podría incluir esta foto en la serie «Soluciones de bajo coste» o «R.O.M., Reciclaje O Muerte».
Cronología de la estupidez supina: un tipo roba un pañuelo a una hermandad de Tomelloso hace dos años, la hermandad hace la denuncia el año pasado y el ladrón publica un vídeo este año. El vídeo que se puede ver aquí tiene la voz alterada y el tipo sale disfrazado, exige como rescate la cantidad de cinco bidones de calimocho para que la gente disfrute, en caso contrario amenaza con quemar el objeto.
Por supuesto y tras cortas investigaciones después de la publicación del vídeo, el muchacho fue detenido. Se supone que el objeto fue devuelto a sus propietarios y que los jóvenes a los que pretendidamente iba destinado el rescate tuvieron que buscarse sus propias libaciones.
Disfruten de dos fotogramas de tan corto pero jugoso producto del altruismo nacional.
Prometo no dar más la paliza con semanasantadas, que bastante habrán tenido ya.
Uno no sabe si estas cosas son publicidad o regodeo. Decidan los visitantes a esta página por su propia cuenta.
La foto de la ermita se pueden ver los instrumentos de tortura que, según la tradición cristiana, usaron para martirizar al Cristo: martillo, tenazas, clavos, lanza, esponja y escalera. Dicho en palabras usadas por los acólitos de esa religión, la pasión. Todo ello bien visible en la puerta del edificio, plateadito y brillante para mayor excelencia.
Creo que se trata de Idanha-a-nova, pueblo no lejos de Monsanto, Portugal.
Escaparate de una tienda de ropa en la que han puesto una decoración muy de la época. La foto ya tiene algún tiempo y no me acuerdo de dónde la hice, pero aquí queda el testimonio del aprovechamiento del negociante. Nótese la paradoja de anunciar trajes con la figura de un ser (¿hombre?¿dios?) desnudo.