Ayer día 11 de octubre, víspera de tan vomitiva fecha de exaltación patria (¿cuando nos daremos cuenta de lo que es realmente importante?), veía yo en la sección de última hora de la página web del recién estrenado diario Público este pedazo de notición (el subrayado es mío):

En fin, señores de Público, pueden ustedes quedarse tranquilos al menos por el momento. Seguimos ofreciendo el beneficio de la duda… todavía.